Viajeros del Sur

Reportan Gabriela, Maria Paula, Mauricio y Gonzalo

Ya estamos en la destorcida. Lavando las motos, haciéndoles algunos arreglos y buscando la mejor forma de devolverlas a Mateo, lo mas próximo posible al estado en que las recibimos.. Y eso no es fácil. No creo que Mateo sea tan burro como para volver  a meterse en un negocio de estos. Los 14.000 kms recorridos, con algunos buenos tramos en destapado, hacen mella en cualquier máquina; es decir, al regresar es inevitable notar el desgaste y que algunos inconvenientes mecánicos surjan.

De nuevo, nuestros agradecimientos a don Mate por tan generoso préstamo.

Durante todo el viaje estuvimos peleando con unos intercomunicadores Scala que muy amablemente nos prestaron Nicolás Serna y Camilo Buriticá. Creo que al llegar a San Francisco de regreso, ya estábamos empezando a manejarlos bien, pero no les garantizo nada.  Son un camello!!  Sin embargo, sirvieron mucho en los momentos cruciales, que es lo importante. Muchas gracias.

En cuanto a hospitalidad y alojamiento, ni que decir de las estupendas atenciones recibidas. Miriam Gil y su marido Dennis nos trataron como reyes en Vancouver. Don Bebo Vargas hizo de las suyas en Prince George y nos atendió muy bien con paseo a picnic y remada en canoa incluida. Y finalmente Lucía Vargas no atendió de maravillas  en el Hotel Bell 2, donde ella se encontraba trabajando y no nos dejó pagar ni un centavo.  Finalmente, Gaba y yo estamos pasando un par de noches en el apartamento de Cristina Gutiérrez, quien esta de viaje de bodas y se lo tiene “prestado” a Mateo. A todos ellos nuestros agradecimientos mas sinceros.