Reportaje de Gonzalo Bueno
Hacemos un pequeño paréntesis en los relatos y las crónicas de Pedro y Juanita en el recién comenzado viaje de ÁFRICA 2.014, para contarles de las experiencias del pasado «puente» ( fin de semana largo, con lunes festivo). Aunque comenzamos el viaje combinando sol con algo de lluvia y mal tiempo, el resumen general es que fue un tour espectacular.

Decidimos hacer un recorrido por el llamado Parque Natural de los Nevados, que es una enorme extensión de casi 60.000 hectáreas, con alturas que van desde los 2.600 hasta los 5.300 msnm, con la variedad de flora y fauna que esta gama de alturas le proporciona. En su interior son famosos los picos nevados del Ruiz, Santa Isabel, Quindío y Tolima quienes le dan su nombre al parque. Sin embargo, lo primero que debemos resaltar es que el calentamiento global acabará en pocos años con las nieves perpetuas de estas hermosas montañas y que su nombre, «nevados», será simplemente un epitafio de mal gusto que las futuras generaciones no sabrán entender de donde salió. Por ejemplo, solo como un dato anecdótico, los tres viejitos que participamos en esta travesía habiamos visitado el Nevado del Ruiz hace 40 años y la nieve se encontraba inmediatamente al lado del refugio. Se llegaba al refugio en automóvil ó en bus y sin mayor esfuerzo, caminando solo unos cuantos metros, ya se podía «conocer la nieve». Y a eso era a lo que nos llevaban !!! Hoy la situación es muy diferente. La nieve ya no está al alcance de la mano. Subir hasta encontrarla, caminando en esa altitud, es algo pesado. Y tristemente, dentro de pocos años, no habrá mas nieve para conocer por estos lados, por mas esfuerzo que se haga…

Volviendo a nuestro paseo, salimos solamente Arturo Posada, Nicolás García y este cronista, el viernes en la tarde. Bajamos al valle del Magdalena por Cambao, carretera secundaria. Pasamos por el extinto Armero, el pueblo que hace 29 años fue totalmente arrasado por una avalancha que venía precisamente del Ruiz, cuando el Volcán-Nevado tuvo una intensa actividad y dejó a todo el país de luto con un escabroso saldo de mas de 25.000 muertos y las historias de algunos miles de sobrevivientes damnificados que perdieron su familia, su casa, su ganado, todo… Al final de la jornada pernoctamos en Líbano en un excelente hotel y centro de convenciones: Pantágora.
Mapa de la primera parte aqui
El recorrido real de trochas y/o carreteras destapadas que hicimos fue muy sencillo. Cruzamos a la ida la cordillera central por el norte, entrando por Murillo al Nevado del Ruiz y al regreso lo hicimos por el sur, yendo de Salento a Cajamarca/Ibagué por los bordes del Volcán Machín y del Nevado del Tolima.
Mapa del regreso aquí.

El trayecto ideal seria empatar, cruzando el parque por dentro, el refugio del Ruiz con Salento en el Quindío. Pero como es de suponer, esta ruta tiene muchas restricciones de las autoridades ambientales, buscando preservar tanto el parque como a los visitantes, pues el recorrido es largo, por encima de los 4.300 msnm, muchas veces los turistas se pierden y en fin, hay todos los riesgos de un terreno inhóspito. Adicionalmente, en ésta oportunidad el Volcán-Nevado tuvo alguna actividad durante todo el fin de semana (temblores y fumarolas) que aumentaba la incertidumbre.

A pesar de la nubosidad y lo cerrado del día, el paisaje que se aprecia, las fuentes y caídas de agua, los cañones que se han formado con la actividad volcánica reciente y/o en millones de años, son indescriptibles.

Trataré solo de colocar un montón de fotos para ambientar las sensaciones y la emoción que nos produce recorrer este tipo de caminos en el territorio nacional. En particular, puedo afirmar sin dudarlo que cada día me gustan mas los páramos y se siente un gran placer al visitarlos y recorrerlos en moto.

El cañon del río Azufrado es muy especial. En el aviso indican que se se pueden apreciar los efectos de la avalancha del 13 de noviembre de 1.985. A pesar de su efecto devastador abajo, en Armero, no podemos dejar de decir que acá dejo un hermoso paisaje.

Al llegar a la entrada principal del parque nos confirmaron su reciente actividad y nos informan que por tanto estaba cerrada cualquier posibilidad de entrar. Por otro lado este sábado era el día de partido de fútbol de Colombia en el mundial (contra Uruguay).
Las absurdas medidas de control a los desmanes en las celebraciones incluían la prohibición de la circulación de las motos en diferentes ciudades, entre ellas Pereira. Por tanto, tuvimos que salir rápidamente del lugar y bajamos por la carretera principal a Manizalez, para tomar la Autopista del Café hacia Pereira y Alcalá. En esta población nos recibieron muy amablemente en una finca, Rodolfo Velez y su señora, la poetisa Ana Milena, parientes políticos de Nicolás. Fue un descanso muy agradable, con partidos de fútbol (triunfo de Colombia, desde luego), ordeño, piscina, cabalgata, frijolada y aguardienticos… A pedir de boca.

Pero como todo lo bueno no dura eternamente, el lunes arrancamos de vuelta. Para el retorno, como lo decía arriba, planeamos la ruta por Salento a la población de Toche y de allí a Cajamarca e Ibagué.

Desde Salento empieza la carretera de tierra, pero como pueden apreciar en las fotos, siempre está muy bien señalizada. En la remontada nuevamente de la cordillera central encontramos los característicos bosques de niebla, con sus infaltables palmas de cera, emblemático «Arbol Nacional» que son un espectáculo muy difícil de describir con palabras.


Esta carretera es una belleza. Se encumbra paralela al conocido paso de Calarcá a Cajamarca por La Línea, pero está lo suficientemente lejos y al norte como para NO poder ver esa otra ruta llena de camiones, tractomulas y carros particulares que compiten frenéticos por «coronar» la cima.

En todo el camino hasta Toche solo adelantamos dos (2) vehículos y no nos cruzamos con ninguno que viniera en sentido contrario. Que delicia !! No importa ni el tiempo ni la distancia, si por acá es mas lejos, si uno se demora el triple. Viajar así, respirando aire puro, disfrutando un paisaje indescriptible, es simplemente una delicia que compensa cualquier esfuerzo adicional que se haga.

El camino, repito, estaba bien señalizado. Miren bien: «Despasio, (sic) terreno liso».

Por algo será que le avisan al viajero de los riesgos de la carretera. Pero afortunadamente estos barriales se sortearon sin problemas y sin demoras.

Toche es una pintoresca población colombiana de dos calles y dos carreras. En el supermercado de la esquina de su calle principal, foto abajo, se encuentra de todo. Tinto, gaseosas, abarrotes, herramientas, llamadas y recargas de celular, restaurante (desayunos, almuerzo, comidas), papelería, miscelanea, pipetas de gas, trabajos de satrería y lo mas importante: en la pared exterior los avisos de la comunidad invitando a celebrar las fiestas del San Juan con música, carne asada y ajiaco…

Este camino tenía el atractivo, para nosotros, de bordear el Volcán Machín y el Nevado del Tolima. Posteriormente a Machín se puede empatar con Cajamarca y por tanto con la carretera tradicional de Armenia – La Linea – Ibagué, o bien continuar por carretera destapada hasta Tapias, El Boquerón e Ibagué.

Estos dos gigantes dormidos pueden hacernos mucho daño. El Tolima es llamado por vulcanólogos como un «Volcan jóven» activo pero estable, mientras que el Machín es mas viejo, activo y potencialmente muy peligroso. En los últimos años se han registrado varios movimientos telúricos con epicentro en este cerro. Compañías canadienses están muy interesadas en explotar oro en el Machín, a lo que se han opuesto las comunidades vecinas por el daño ecológico implícito. Así mismo, han especulado mucho sobre el potencial minero del muy apetecido Coltán (la combinación de dos minerales superconductores de energía, columbita y tantalita) que existe en este volcán.

Pero el peligro es que la madre naturaleza decida no dejarse manosear, que haya primero una erupción y exploten ellos antes de dejarse explotar económicamente por las multinacionales. Una enorme población esta en riesgo: Ibagué, Armenia, Cajamarca, Calarcá y desde luego, en primera línea, nuestros amigos de Toche con sus dos calles y sus dos carreras…

Sencillamente espectacular, gracias por compartir tanta experiencia para alguien como yo que esta empezando es materia prima de alta calidad. Un abrazo fraterno. Santibañez.
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Gracias a Ud Andres por leer nuestras crónicas.
Gonzalo
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Que buen paseo Gonzalo, y veo que no se le ha olvidado el enduro, felicitaciones. Un abrazo
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Carlos,
Gracias por sus comentarios, siempre pendiente de nuestras salidas. Pero lo que queremos desde hace rato es que nos acompañe con una de sus poderosas HONDA 1200 cc con llantas HEIDENAU, por supuesto !!
Gonzalo
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Excelente relato. Para variar.
Un abrazo desde Caracas, Venezuela.
Francisco Sanz Brandt
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Gonzalo, ciertamente que hermosos paisajes, y solamente los podemos disfrutar en moto. Que maravilla.
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Gonzalo: muy buenas fotos, muy buena la investigación periodística y muy buena la compañía, verdad? Saludos, Arturo
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Leí con deleite la crónica del recorrido que hicieron. Sobretodo porque veo un criterio muy válido en los caminos que escogieron y la forma de disfrutar la geografía -física y humana- del país. ¿Es posible contactarse con ustedea con miras a acompañarlos en futuros recorridos?
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Hola. Que buena ruta. De Libano a Salento que tal es la carretera. Muy fuerte el nivel de off?
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Harold,
Gracias por sus comentarios. Realmente de Libano hasta Murillo y aun un buen trecho mas arriba hay asfalto.
Despues es un camino de tierra muy comun y corriente. Nivel de dificultad bajo siempre y cuando se haga como lo hicimos nosotros, esto es, paseando, despacio, sin afanes y disfrutando el paisaje. Todas las motos llevábamos pasajero y no hubo inconvenientes…
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